A veces creo ser diferente, me siento encerrado entre
paredes invisibles donde no tengo espacio para mi creatividad y resulta ser que
lo que todos dicen es que los limites están en mi cabeza pero… hay algo más.
Un día
caminando por la calle mas transitada de mi ciudad pensando como desarrollar el
potencial que ‘’creo’’ tener pase frente
a una mesa de ajedrez donde dos señores movían a gran velocidad las piezas, los
famosos velo-cistas, yo había leído algo sobre ellos, eran jugadores con
gran conocimiento de jugadas y gran
experiencia que desarrollan su juego en el menor tiempo posible, un juego
rápido de ajedrez.
Yo
quede mirando perplejo aquella velocidad con la cual estas personas maniobraban
las piezas mientras daban pequeños golpes al reloj para marcar el tiempo de
cada jugada.
Respire
hondo y me anime a decir que quería jugar. Estos me quedaron mirando y
sonrieron y me dejaron sentar , estaba
nervioso ya que nunca había probado mis conocimientos en el juego con otras
personas de mi nivel.
-: Muchacho, no te desilusiones
si pierdes, eres joven para saber mucho. Al escuchar estas palabras sonreí y le
dije que no se preocupe que sabía jugar algo.
Por cortesía me dejaron comenzar
con blanco y no jugamos por tiempo ya que yo no era velocista. Comencé moviendo
mi peón reina dos casilleros al frente
queriendo terminar rápido con la famosa jugada de el jaque mate pastor pero yo
sabia que no iba a funcionar así que iba a jugar en función de dos misiones, la
primera perder la menor cantidad de piezas posibles y la segunda recordar cual
era mi objetivo, que no es comer piezas sino encerrar a el rey de la mejor
forma posible.
Transcurrieron
alrededor de 5 minutos en los cuales se aproximaron muchos curiosos a presenciar
la emocionante batalla entre juventud y experiencia y no pasaron mas de tres
minutos mas en donde deje a mi rival junto con sus veteranos amigos
petrificados al ver que su rey negro estaba encerrado por mis generales blancos
de una forma que nunca esperó, mientras yo no lo podía creer, había ganado mi
primer partida callejera y la gente alrededor me aplaudía.
Me sentía realizado, embriagado por los aplausos y extasiado
por la victoria me levante y les di las gracias por el juego y me retire con
una sonrisa de felicidad muy grande, al fin me sentí bueno en algo, me sentí
que exprese mi verdadero ser en ese
juego, que plasme mi gran potencial en los mejores 8 minutos de mi vida.
De repente siento que alguien pone mi mano en el hombro, era
un hombre alto con pelo largo y cano ojos azules de un color eléctrico que
nunca había visto antes, sentía como esos ojos podían ver mi alma entera.
Me recorrieron
escalofríos al verlo a los ojos. -: Como te llamas? – me dijo con una
vos seca y fría.
-: Milo, me llamo Milo – respondí al instante pensando que
no debía dar mucha información de importancia sobre mi a este señor que no
conocía.
-: Soy el presidente del club internacional de estrategas
genios, estoy en medio de un viaje para reclutar talentos como el que acabaste
de demostrar ahí atrás en ese juego de ajedrez, eres un muy buen estratega, ¿sabias
que a ese señor al cual le ganaste es el
ex campeón mundial de ajedrez, no?
Quede mirándolo con sorpresa, ¿yo…yo le gane al anterior campeón mundial de
ajedrez? ,
-:Por tu rostro me doy cuenta de que no tenias ni idea ,
bueno , acaso eres bueno en algo mas que
no sea ajedrez?
-: Bue … bueno se armar el cubo de Rubik en menos de 1
minuto y además me gustan los puzles y las matemáticas tanto así como las
ciencias y la astronomía y…..
De pronto me di cuenta que estaba dando demasiada
información a una persona que lo paro en el medio de la calle que no conocía y
que no sabia si debía confiar. -: ¿A que quiere llegar con todo esto señor? ,
tengo prisa – Mentí yo, no tenia nada que hacer mas que llegar a casa a ver
anime o dormir.
-: Bueno – comenzó – a este club el cual soy el presidente
hay mas personas únicas como tu con tus cualidades y habilidades las cuales no
creerías posibles, ven con migo y te
enseñaremos todo sobre como desarrollar tus capacidades al máximo.
Lo mire por un momento y me compro con sus palabras, me dejo
ilusionar fácil, al final soy un soñador, vivo mas en otro mundo que en la tierra,
pero pronto baje a tierra y pensé que después de acceder a acompañarlo me iba a robar, que me estaban
esperando 5 mas a la vuelta de la esquina para llevarse mis pertenencias,
entonces dije-: Mire, no lo conozco pero no gracias prefiero seguir así como
hasta ahora – y seguí caminando, alejándome de el.
-: Si cambias de opinión, solo piensa en algo azul y estaré
ahí para tu decisión – después de escuchar esas palabras di media vuelta para
mirarlo y había desaparecido , no había ni rastro de el. Bueno, pensé, al final
era toda pura charla, tal vez si accedía terminaba intentado venderme algo,
pero igual me quede con la duda de que hubiese podido ser.
Ese día llegue a mi casa y como tenia pensada mire
anime hasta tarde y después me acosté a
dormir, sin percatarme de que mañana iba a ser un día agitado y lleno 
cosas nuevas ...

cosas nuevas ...
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